martes, noviembre 22, 2011

Para, que me bajo

Reenamorarte para volver a empezar pero desde el conocimiento o la conciencia te ayuda a desconectar de esta rueda que gira y gira sin darte la oportunidad ni si quiera a plantearte que quieras bajarte.
Las ideas van y vienen, las tareas pendientes se acumulan en la agenda inmaterial de tu parte cerebral derecha y los días dejan de llamarse así cuando no das tregua entre el amanecer y el anochecer.

¡Espera, un segundo, yo me quedo aquí! ¡qué si joder, si no paras tú, yo me dejo caer! dame dos minutos, o quizás unas cuantas horas, da igual. Desconecta la parte izquierda, o la derecha, mejor las dos, y olvídate de las obligaciones que ya dejo de enumerarlas a partir de la décima.Ven, miráme, cierra los ojos. No te preocupes, esta todo lo necesario en on. ¿dónde prefieres? yo me dejo. Sí, perfecto, justo ahí.

Menos mal, mi parte izquierda junto con la derecha no dejaban correr la sangre al resto del cuerpo mientras éste vivía como autómata vagando entre el frío y la indiferencia. Vaya, parece que al final todo vuelve a estar calentito y sensible. Menos mal que no se te ha olvidado. Cuando empezamos temí por tus habilidades y por mi placer. Pronto recordé que poco importa el resto si tengo esto.

Sí, tienes razón, qué bien que decidimos bajarnos. Bueno, da igual, ya encontraremos la manera de volver a subirnos. Tsss...un ratito solo.
Se está tan bien aquí contigo...
 
Free counter and web stats